Alexis Argüello ¿Non Grato?

Michangelo

El día miércoles 30 de abril, de 1975, desde la ciudad puerto, Corinto de Nicaragua, llegó a la oficina del doctor Eduardo Román en Managua, el capitán GN, Luis Abea comandante de armas de Corinto.

En la oficina del abogado, estaba en ese momento, Alexis Argüello, quien  era campeón mundial de peso pluma. La razón de la visita del oficial de la Guardia Nacional, era solicitar al doctor Román, representante legal de Arguello, sus buenos oficios para que su pupilo, visitara la ciudad de Corinto.

Dicha solicitud, era para el día 3 de mayo, en vista de la celebración en esa ciudad, del Día de la Cruz – lo cual no sé si aún se celebra- y por tal razón realizarían una  cartelera de boxeo amateur, con la presencia del campeón mundial. Argüello, se comprometió a estar presente.

El capitán Abea, al frente de la organización, anuncio con bombos y platillos la llegada de Argüello. Invirtieron dinero, hicieron  boletos para la función del programa boxístico, pagaron publicidad local y esperaron.

Resulta que Alexis no llegó. Muy indignado, el entonces capitán Abea, denunció públicamente, -en el Diario Novedades-, la no llegada de Argüello. Dijo que era un irresponsable y que muchos ciudadanos, con él a la cabeza, lo nombrarían Non Grato.

Abea se quejó más por los gastos en que incurrió y por la exigencia de muchos celebrantes y aficionados que habían llegado, según Abea, de Chinandega, León y Estelí, pidiendo que les regresara el dinero que habían pagado por entrar a la función, con el fin de ver al entonces Campeón Mundial Pluma.

Abea también dijo en su momento, que los gastos andaban  por los 20 mil córdobas y que tenía intención de hacer una demanda por esa cantidad al ídolo nicaragüense.

Los jóvenes valores de hoy día, de igual manera, en ocasiones son invitados a determinados eventos.  Deben cuidar de no comprometerse, o de cumplir si lo hacen. Las personas se crean expectativas y exigen.

En otras ocasiones, se ha dado el caso, de que organizadores de un evento, con fines propagandísticos,  que llegará a la ciudad o Municipio determinado boxeador y ni siquiera lo han visto. Mucho cuidado con los burladores.