viernes, 16 de septiembre de 2016

¿De dónde vengo, a donde voy?


Jamás imagine verme envuelto en  tan bonita, cada vez más  agradable y necesaria labor, ser un Cronista Deportivo. Todo comenzó a partir de que Alexis Argüello volviera al país en 1991, después de varios años de ausencia.

O quizá,  sin darme cuenta, esto me atrajo cuando empecé a leer con cierta fascinación, las gestas, noticias y biografías de Muhammad Ali, Sonny Liston, Ultiminio Ramos, Vicente Saldivar y otros como Carlos Monzòn, recién llegado  a la cúspide y del panameño Ismael Laguna.

Realmente no recuerdo siquiera haber pensado en dedicarme algún día a  comentar deportes, menos a escribir. Pero aquí estoy 25 años después, teniendo un poco de aceptación entre algún sector de aficionados y transitando por todo lo difícil que cualquier otro trabajo presenta, con humanos ejerciendo lo mismo.

Luego, lo de buscar noticias y revistas de boxeo para  leer y a veces para guardar incluso, lo continué en mis años de boxeador. El ser boxeador fue algo a lo que dediqué tiempo más por necesidad que por creer que tenía atributos, talento o pasión. En esto hubo otros factores que podría referir  más adelante o en otro escrito.


 Al retornar Alexis en 1991, ya lo he dicho en otras ocasiones, me envió mensaje con una persona que he olvidado, diciendo que quería verme para conversar y recordar tiempos.

Eran días agitados en los que a raíz de la derrota electoral del Sandinismo y la subida al poder de la UNO, muchos, miles estaban regresando al país en busca de ocupar puestos unos o de recuperar bienes y propiedades confiscadas otros.

Fue en uno de esos momentos de gran depresión  que a veces mostraba Argüello, momentos en los que manifestaba deseos de volver a USA, porque aquí “no hay vida”, decía él,  o le decía un amigo en ocasiones.

“No te preocupes pofito. Sii, hay vida en Nicaragua, lo que se necesita es buscar algo que hacer. Déjame yo voy a buscar una Radio para que hagamos un programa solamente de boxeo” le dije una tarde. Y fue que busqué oportunidad en Radio Nicaragua primero y en Radio Corporación después.

Corporación, esa tan escuchada Radio emisora es donde nació el programa de boxeo que puse por nombre “Fuera Second”, y por no entrar en contradicciones con ciertas mentiras que se dicen de su fundación, y por no herir sentimientos, no entraré en detalles al respecto. Calixto Vargas y yo fuimos los firmantes de un contrato.

De ello solamente agregaré que, Edgard Tijerino me llamó un día antes de empezar el programa, y me preguntó: “Es verdad que vas a poner un programa de Boxeo con Alexis en La Corporación?”. Si le dije, y se llamará “Fuera Second”.

¡!Aaah¡¡, como el nombre de mi columna”, me dijo Edgard. Es verdad, no me había percatado de eso. Le voy a buscar otro nombre, acoté. “No, no, no déjalo así, yo buscaré  otro nombre para mi columna, salúdame a Alexis”, respondió  casi al unísono Tijerino. Lo sentí, noble, muy generoso de su parte, como en realidad creo que es.

Esto de comentar boxeo preferiblemente, lo hice cuando por cierta discrepancia y actitud egoísta  –premeditada-con alguien, tuve que irme de la Corporación, lo que  23 años después agradezco que haya ocurrido.

De los otros deportes aprendí un poco y siempre he discutido. El Fútbol y natación, practiqué cuando era adolescente interno en el  “Hogar Zacarías Guerra”. Don Eugenio Leyton era el Periodista Deportivo que andaba tras los pasos del Fútbol en la época.

El beisbol antes del boxeo,  lo jugué a nivel de Mayor “A”, en liga de barrios. No fui de los mejores, pero no desentonaba.

Razones y momentos para abandonar esto que ahora me absorbe el tiempo, me han emboscado. Envidiosos ciudadanos que me hicieron zancadillas, hubieron. Pero insistí, creí que yo era capaz de hacerlo, que no debía abandonar.

Pese a que me llené de ira y malas intenciones contra esas personas, son ahora por las que le doy gracias a Dios. De no encontrar esos tropiezos y recibir esos golpes, no hubiera sacado fuerzas, ni la fe que necesitaba para confiar.

Si estos personajes, una vez en Radio, otra vez en la Tv.y otra en lo escrito, no hubieran existido, no busco la manera de ser independiente  en este trabajo, por el cual sin percatarme he sido felicitado más de 10 veces. 

Y cada vez con más continuidad. He aprendido un poco, tanto del deporte, como de comentarlo. He querido buscar otra cosa que hacer en algunas ocasiones, aunque no temo a nada, no me decido a  dejar este camino.


¿Cronista o escritor?

Creo que para dejar de hacerlo,  me detienen circunstancias que me hacen reflexionar. Por ejemplo; hace años un joven Cronista Deportivo, que iniciaba el oficio y a quien siempre le he visto diferente a la mayoría. Humilde, apartado y estudioso, me dijo algo que me impresionó.

Este joven es graduado como periodista en no sé cuál Universidad, pero lo es. A èl le dije un día: “Cuanto me hubiera gustado tener un título profesional, lástima que no estudié”. El joven amigo me respondió: “Cuanto me gustaría saber lo que usted sabe de boxeo don Michangelo”. Guarde silencio entonces.

Tiempo, mucho tiempo atrás, otro joven en esa epoca, y que igualmente empezaba, llegó a mi casa para una entrevista de Tv. “Y cuando te diste cuenta que tenías talento para escribir”, fue una de sus preguntas. “Bueno, eso de Talento lo dicen ustedes. Yo lo que te puedo decir es que un día no tenía trabajo, tenía si, mucha hambre y creí que podía hacerlo, fue para rebuscarme algo, no para destacarme, ni mostrar talento”, respondí.


Oscar Miranda, el siempre amable y caballeroso Mirandita, un día me llamó para que comentara boxeo en Canal 2. Yo era un “mocosito” aun, apenas comenzaba en la labor de comentar públicamente. Compartir con Xavier Araquistain y Edgard Tijerina fue agradable. De ahi me fui por algo que no vale la pena comentar.

Edgard Tijerino me tiene atrapado en el agradecimiento por algo que nunca valoré tanto como ahora. Cada vez que le llevé a La Prensa un escrito de boxeo, me lo publicó. Nadie, en ningún medio, me ha ofrecido como Edgard anunciarme o promover la Revista formalmente y a diario en su programa Deportivo Radial, Doble Play.


Don Tito Rondón, debe estar siempre en mi gratitud también, muy gustosamente me recibió unas tres o cuatro notas y las publicó.

“Me sentí achumicado, una vez que Francisco Meléndez, quien era entonces Director Administrativo, creo, de El Nuevo Diario, me presentó en su oficina con un amigo diciéndole: “Él es Michangelo, te lo presento, es Escritor”. “No, no. Soy Cronista Deportivo”, acoté de inmediato.

“Pero si editas una revista, sos el que haces la mayoría de los artículo, lo haces bien y de eso comès, ¿entonces que sos. Es que sos acomplejado y crees que ese nombre de escritor te queda muy grande?. No hombre, usted es un Escritor”, insistió Meléndez
.

Amigos, no quiero aburrirles. Quise compartir un poco de mis vivencias, un poco de lo que desde hace tiempo, igual que la Historia del Boxeo Nicaragüense, estoy acopiando, para publicarlo algún día, si Dios me lo permite.

No hay comentarios:

Publicar un comentario